Una vez más como cada año, Tomares celebra una de sus fiestas más tradicionales y emblemáticas, la salida del patrón del pueblo, San Sebastián. Este año más emotivo que nunca, ya que se ha celebrado su 60 aniversario, que a contado con numerosos estrenos.
El pasado 22 de enero, San Sebastián, patrón de la localidad tomareña, recorrió las calles de tomares en una tarde-noche repleta de estrenos y emociones.
Este año se ha estrenado un nuevo itinerario, además de nuevas parihuelas, faldones, nueva junta de gobierno, nuevos costaleros y se visitó por primera vez, la nueva Casa de Hermandad.
Con más asistencia que otros años y por supuesto más emoción, la hermandad quiso rendir homenaje al Santo en su 60 aniversario de los actos de culto oficial.
Fue un desfile procesional encabezado por el Hermano Mayor de la Hermandad Sacramental, Javier Rueda y por el alcalde tomareño, Jose Luis Sanz y demás Hermanos.
La música a ritmo de la Agrupación musical de Nuestra Señora de la Encarnación, de la Hermandad de San Benito, de la capital sevillana.
El paso fue llevado por 20 costaleros de la Hermandad, que cuenta con una cantera de 206 Hermanos costaleros voluntarios.
Como cada año el pueblo se amontonó a las puertas del ayuntamiento para presenciar la entrega de ramos de flores y ver los hermosos fuegos artificiales.
Próximamente, podremos disfrutar de la Romería de San Sebastián, que tendrá lugar el primer domingo de mayo en el Zaudín.
Entrevista a :
David Acosta, de 19 años.
-¿Ha sido tu primera vez sacando un paso procesional?
D: Si esta ha sido mi primera vez y espero repetir nuevamente.
-¿Qué se siente?
D: Es algo emocionante, a quien le gusta realmente este mundo, es algo fabuloso.
-¿Tienes otras aficiones relacionadas con el tema?
-Si ,toco en la banda municipal de cornetas y tambores de San Sebastián de Tomares.
Muchas gracias.
¿Sabías que…?
San Sebastián nació en Narbona (Francia) en a segunda mitad del siglo lll. Fue capitán del emperador Diocleciano, pero él era cristiano y no obedecía algunas órdenes de sus superiores a la hora de los sacrificios. Ayudaba a los más necesitados, cuando Maximiano se sintió traicionado por Sebastián , ya que este era cristiano y lo ocultó, este lo mando a matar, atándolo a un árbol del estadio de Palantino, donde lanzaron sobre él una lluvia de flechas que luce en su costado, luego se marcharon y lo dejaron el cuerpo abandonado. Una cristiana llamada Irene, vio que aún estaba vivo y lo llevo a su casa donde lo escondió y curó las heridas, una vez recuperado, plantó de nuevo cara al emperador y este lo mandó a azotar hasta que falleció.
Loli Álvarez Blanco
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